Entrevista a ALICIA MÁRQUEZ

¿Qué es para usted la poesía?

Es la vida. Es andar por la cornisa. Es subirme a un árbol y mirar lo que pasa allá abajo.

¿Podría usted contarnos un poco de su vida, de sus obras publicadas, sus premios, su actividad literaria?

Mi vida, como la de todos, un día empezó. Me gustaba que me leyeran cuentos, me gustaba el teatro, me gustaban los títeres. Me gustaba el cine y representaba en el espejo todos los personajes. Después fui a la Facultad de Filosofía y Letras, primero en Ciencias de la Educación, después en Letras y después no. Soy además, creativa publicitaria, guionista, actriz y directora de teatro.

Mis obras publicadas son dos: Se vive, editada por Editorial Argenta y Reunión de Voces, que escribimos todas las integrantes del Grupo Pretextos, editado por Ediciones El Mono Armado.

Dos novelas, “Azulunala” y una para niños “El ladrón de sueños” que resultó una de las quince finalistas entre seis mil participantes en el Certamen de Novela Infantil y Juvenil de Editorial Norma, Colombia.

Algunos de los premios literarios fueron:

Mención de Honor Certamen Litterae 00.

Primer Premio Categoría Poesía Infantil Certamen Poetas de Floresta 2000

Premio Inclusión en la Antología “Poetas de Fin de Siglo”, Editorial Tierra, 1999.

Tercer premio Poesía Bienal Dimensión, 1995.

Fue una de las seleccionadas para figurar en el libro “Poesía en el subte”, certamen que organizaron Metrovías y Revista la Nación y que publicó Ediciones La Flor, entre setenta y cinco mil aspirantes.

¿Cuándo empezó a escribir? ¿por qué?

Cuando estaba en cuarto grado, después de leer Platero y yo. Para mí, a los nueve años, fue como un rayo esclarecedor. Y dije, simplemente: yo quiero hacer esto.

¿Cómo definiría a su poesía?

A veces cuasi periodística. Un poco irónica otras veces. Llana. Clara. Sintética.

¿Qué autores influyeron en su poética?

Antonio Machado, Jacques Prevert, Federico García Lorca, Pablo Neruda, Juan Ramón Jiménez, Rafael Alberti, Manuel Machado, Jorge Luis Borges, la última época de Alfonsina Storni, Baudelaire,
Eduardo Galeano, Augusto Roa Bastos… tantos.

¿Cuál es el fin que le gustaría lograr con su poética?

Conmover. Ser espejo del que me está leyendo. Hacer feliz a alguien. Emocionar.

¿Qué poema elegiría usted si tiene que optar por uno en especial? ¿Por qué?

Elegiría cualquiera del Romancero Gitano. Cualquiera. Son todos bellos, con metáforas exquisitas y una musicalidad incomparable.

¿Cómo ha cambiado su lenguaje poético a lo largo de los años?

Como a todos, por supuesto, se hizo mucho más ajustado, mucho más acotado, y trato en lo posible de no irme por las ramas. Una metáfora por vez, si tiene que ser, y si no, no.

¿Para usted se nace o se hace escritor?

Se nace con un gusto por escribir pero se hace escritor, todos los días, escribiendo.

¿Qué consejos le daría a un joven escritor/escritora que se inicia en este bello camino de la PALABRA?

Que lea mucha poesía y que escriba mucho. Y que no tenga la soberbia de creer que si lee poesía le va a cambiar “el estilo”. Al contrario, se lo va a enriquecer.

¿Cómo ve usted actualmente la industria editorial?

La veo globalizada, salvo excepciones. Y me da mucha pena.

Si tuviera que recomendar un libro de poesía, prosa, cuento, novela etc ¿Cuáles recomendaría?

Redoble por Rancas, de Manuel Scorza, cualquiera de las novelas de Ángeles Mastretta, los cuentos de Haroldo Conti, La casa verde, o Con versación en la Catedral, de Vargas Llosa, Hombres de maíz de Miguel Ángel Asturias, toda la poesía de Borges, Rayuela, de Cortázar, las novelas policiales de Dashell Hammet, de Raymond Chandler, de Patricia Highsmith, El Rodaballo, de Günter Grass, todas las novelas de Jorge Amado, por supuesto Borges, Silvina Ocampo, María Granata, Cesare Pavese, Baudelaire, La revolución en bicicleta, de Mempo Giardinelli, todas las novelas de Osvaldo Soriano, Memoria del Fuego, de Eduardo Galeano, La Tregua, de Mario Benedetti… La lista no se termina más.

¿Qué opina de las nuevas formas de difusión de la palabra, ya sea en páginas de Internet, foros literarios cibernéticos, revistas virtuales, ñusleter, blogs etc?

Me parecen muy interesantes como medio de difusión, aunque, de corazón, sigo prefiriendo el libro. De repente, hay tanta información que se transforma en una desinformación.

Por último ¿Quiere usted agregar algo?

Sí. Gracias por preguntarme y dejarme responder.

Alicia Márquez